Google Mangle: el nuevo lenguaje que puede cambiar cómo trabajamos con bases de datos
Justo cuando parecía que el trabajo con datos estaba condenado a seguir anclado en las mismas herramientas de siempre, SQL para las consultas declarativas, Python para la lógica compleja y cientos de librerías para cubrir las lagunas entre ambos mundos, aparece un nuevo lenguaje capaz de unir esos territorios en uno solo, Mangle.
Lanzado oficialmente el 22 de agosto de 2025, Mangle es la propuesta de Google para redefinir cómo los desarrolladores consultan, razonan y trabajan con datos complejos. Y lo interesante no es solo lo que hace, sino cómo lo hace, combinando la lógica de Datalog, la expresividad de un lenguaje moderno y la capacidad de manejar datos dispersos, grandes y altamente relacionales sin perder claridad.
Suena técnico… pero en la práctica significa algo simple, menos código, más inteligencia y en consecuencia más velocidad para resolver problemas reales.
Un lenguaje que “razona” sobre los datos
Mangle no es un lenguaje generalista. Está diseñado específicamente para lo que Google llama deductive database programming: consultas que no solo buscan datos, sino que deducen información a partir de relaciones complejas.
Es una evolución directa de Datalog, pero con varias capas de potencia añadida. Para el desarrollador, esto se traduce en consultas que parecen casi descripciones de la realidad. “Quiero esto que se cumple si también ocurre esto otro”. No hay bucles, no hay boilerplate, no hay ingeniería compleja. Hay lógica.
La intención de Google es clara, convertir tareas que siempre han sido dolorosas en algo elegante y manejable.
Las funciones que colocan a Mangle en otra liga
Aunque lo compararán con SQL o con Python, la realidad es que Mangle se mueve en un terreno distinto. No reemplaza esos lenguajes, pero sí soluciona los huecos entre ambos.
- Agregaciones nativas sin complicaciones: Suma, media, recuentos… pero dentro de un lenguaje lógico. Mangle puede obtener datos dispersos, unirlos y agregarlos en una sola operación sin “malabares” entre tablas o sistemas.
- Funciones dentro de consultas: Aquí es donde SQL empieza a quedarse atrás. Mangle permite meter funciones directamente en las consultas, algo extremadamente útil cuando necesitas aplicar reglas de negocio, convertir valores o procesar datos al vuelo.
- Tipado opcional: Ni tan rígido como los lenguajes estáticos ni tan laxo como los dinámicos. Si quieres seguridad, el tipado está ahí. Si prefieres ir más rápido, puedes desactivarlo.
- Reglas recursivas: El superpoder real. Con recursividad declarativa puedes recorrer jerarquías, grafos, árboles organizativos, mapas de rutas o redes complejas sin escribir ni un bucle. Algo que SQL nunca ha hecho bien y Python hace… pero con toneladas de código.
- Puente entre bases de datos: La interoperabilidad es uno de los grandes problemas modernos, datos en Postgres, logs en BigQuery, grafos en Neo4j… Mangle puede consultarlos de forma coherente sin obligarte a cambiar de mentalidad entre cada sistema.
SQL fue creado para preguntar. Python para transformar. Mangle para razonar.
Esto significa que ocupa un espacio que se vuelve más importante cada año: el de los datos complejos que no caben en una sola tabla y que requieren más que filtros y JOINs.
Comparado con SQL, Mangle es más expresivo y mucho más adecuado para datos relacionales con estructura cambiante.
Comparado con Python, Mangle evita tener que escribir todos los pasos de la lógica. En lugar de explicar “cómo” obtener algo, simplemente declaras “qué” debe cumplirse, y el motor lo resuelve.
La diferencia es enorme cuando escalas. Consultas que en Python ocuparían decenas de líneas, o que en SQL serían prácticamente imposibles, en Mangle caben en un par de reglas.
Conclusión
Porque estamos entrando en una era donde los datos no solo deben consultarse, deben interpretarse.
Los modelos de IA, los sistemas distribuidos, los grafos semánticos, las plataformas multi-sistema… están creando un ecosistema donde las herramientas tradicionales empiezan a quedarse cortas.
Google lo sabe.
Y Mangle es una respuesta muy bien pensada, un lenguaje lógico moderno, expresivo, interoperable y preparado para manejar datos que ya no viven en una sola tabla, ni en un solo tipo de base de datos, ni en una sola forma.
No estamos ante un reemplazo de SQL, ni de Python, ni de los lenguajes tradicionales.
Estamos ante una nueva pieza en el ecosistema, el lenguaje que une la consulta, la lógica y el razonamiento en un mismo lugar.
Referencias