El uso de desarrollo web con una estrategia Headless, es decir una web sin back-end puede llevarnos a realizar malas prácticas que pueden poner en compromiso la seguridad del sitio web.

Pasar por alto la seguridad front-end puede dejar tus aplicaciones web vulnerables a una amplia gama de amenazas, incluidos ataques de cross-site scripting (XSS), ataques de falsificación de solicitudes entre sitios (CSRF) y otras vulnerabilidades de seguridad. Es por ello que me gustaría que me acompañes a explorará las mejores prácticas esenciales de seguridad front-end para ayudarte a proteger tus aplicaciones web contra scripts maliciosos y posibles riesgos de seguridad.

Comprender el panorama de la seguridad front-end

Antes de profundizar en las mejores prácticas, establezcamos una comprensión básica de la seguridad front-end y la terminología asociada. La seguridad front-end se ocupa principalmente de proteger el lado del cliente de las aplicaciones web, incluida la interfaz de usuario y cualquier código JavaScript ejecutado en el navegador del usuario. Se centra en mitigar los riesgos de seguridad mediante la implementación de diversas medidas de seguridad.

Mantener una mentalidad de ciberseguridad en el desarrollo front-end es crucial porque enfatiza la importancia de las medidas de seguridad proactivas. Los desarrolladores de aplicaciones web debemos estar atentos en prevenir vulnerabilidades comunes como XSS y garantizar que los datos de los usuarios permanezcan protegidos. Significa seguir las mejores prácticas, mantenerse actualizado sobre las amenazas y pensar como un atacante potencial para identificar y corregir las vulnerabilidades antes de que se conviertan en problemas. Esta mentalidad ayuda a crear aplicaciones web seguras que priorizan la privacidad y seguridad del usuario desde el principio.

Amenazas de seguridad comunes en el desarrollo front-end

Exploremos las amenazas de ciberseguridad más comunes y peligrosas que se enumeran en los 10 principales riesgos de seguridad de aplicaciones web de OWASP.

  • XSS: Los ataques XSS ocurren cuando se inyecta código malicioso en una aplicación web y se ejecuta dentro del navegador de un usuario. Esto puede provocar el robo de datos confidenciales y otras actividades maliciosas.
  • CSRF: Los ataques CSRF implican engañar a los usuarios para que realicen acciones que no tenían intención de realizar. Los atacantes aprovechan la confianza que un sitio web tiene en el navegador de un usuario para ejecutar acciones no autorizadas.
  • Inyección: Los ataques de inyección, como la inyección SQL, implican la inserción de código malicioso en los campos de entrada de los formularios o las URL, que luego pueden ejecutarse en el lado del servidor, comprometiendo potencialmente datos confidenciales.
  • Scripts externos: Las bibliotecas de terceros y los recursos externos en tu aplicación web pueden introducir vulnerabilidades de seguridad si no se examinan adecuadamente.
  • Control de acceso erróneo: El control de acceso erróneo ocurre cuando los usuarios pueden acceder a áreas no autorizadas o realizar acciones que no deberían. Es una falla de seguridad crítica que amenaza la confidencialidad de los datos y la integridad de las aplicaciones.

Mejores prácticas de seguridad front-end

Ahora que tenemos una idea clara de las amenazas, exploremos algunas de las mejores prácticas para fortalecer la seguridad de tu front-end.

1. Validación y desinfección de inputs

Uno de los pasos fundamentales en la seguridad front-end es la validación y desinfección adecuadas de las entradas en los formularios. La entrada del usuario no debe ser confiable bajo ninguna circunstancia.

Aunque la validación y la desinfección de los inputs van de la mano, son dos procesos distintos destinados a garantizar que la entrada proporcionada por el usuario no interfiera con el flujo normal de su aplicación web. La validación actúa como un filtro para la entrada de datos del usuario, asegurándose de que cumpla con un conjunto de reglas decididas por el desarrollador. Por otro lado, la sanitización consiste en eliminar cualquier carácter no deseado que pueda ser potencialmente dañino.

Pero ¿por qué son importantes estas técnicas? Bueno, te ayudan a protegerte contra algunas de las vulnerabilidades de seguridad más comunes y dañinas, como XSS, inclusión de archivos locales (LFI, EXE entre otros) o inyección SQL, manteniendo la integridad de los datos confidenciales y previniendo cualquier comportamiento inesperado de la aplicación web.

Ahora que hemos hablado de estos procesos y su importancia, veamos cómo implementarlos. Hay muchas formas de implementar la validación y la desinfección en su código. En un nivel muy básico, puedes usar atributos HTML5. Pero, si deseas ir un paso más allá, puede utilizar JavaScript para realizar una validación compleja o eliminar ciertos caracteres de la cadena de entrada. Si utilizas algún framework para tu desarrollo web, también se recomienda buscar librerías que puedan ayudarte con el manejo de la entrada. Si tu código utiliza la entrada para realizar consultas a la base de datos, también debes usar declaraciones preconfiguradas, ya que protegen contra ataques de tipo inyección SQL. Para garantizar las mejores prácticas, se recomienda realizar la validación de entrada tanto en el front-end, como en el back-end de la aplicación web si cuentas con back-end.

2. Evite los scripts inline

La protección contra scripts inline es vital para la seguridad del front-end. Estos scripts suponen un riesgo importante, ya que pueden ejecutar código arbitrario. La mejor práctica es separar JavaScript de HTML mediante scripts externos e implementar políticas de seguridad de contenido (Content-Security-Policy CSP) para definir fuentes confiables para scripts y recursos. Al hacerlo, creas una defensa sólida contra posibles ataques XSS y mejoras la seguridad general de tu aplicación web.

3. Política de seguridad de contenidos (CSP)

El uso de un CSP en la seguridad de front-end es una medida proactiva para mitigar XSS y otros ataques de inyección de código. Los ataques XSS se aprovechan de que el navegador no puede diferenciar entre código legítimo y código malicioso. Entonces, en lugar de dejar que el navegador ejecute ciegamente cualquier código que solicite una página, lo filtraremos según su fuente. CSP permite a los desarrolladores especifiquemos qué fuentes de scripts, estilos y otros recursos se consideran confiables dentro de una aplicación web.

Para utilizar esta utilidad en tu aplicación, debes definir el encabezado HTTP Content-Security-Policy, con el que puedes crear una lista de fuentes confiables que pueden ejecutar código. Digamos que solo permitimos el uso de código escrito por nosotros en nuestro sitio web. Luego definiríamos el siguiente encabezado:

Si deseas comprobar otras directivas que puedes utilizar con CSP puedes consultar con más detalle aquí.

Al definir una política que dicta qué orígenes están permitidos, CSP restringe la ejecución de scripts inline y recursos externos no autorizados, lo que reduce la superficie de ataque para posibles amenazas a la seguridad. Esto agrega una capa adicional de defensa, garantizando que solo se pueda ejecutar contenido validado y seguro en el navegador del usuario, mejorando la postura de seguridad general del front-end y protegiendo contra la ejecución de código malicioso.

4. Solicitudes HTTP seguras

Al realizar solicitudes HTTP, asegúrate de que sean seguras mediante HTTPS. HTTPS utiliza TLS para cifrar el tráfico HTTP, mejorando la seguridad.

Entonces, ¿por qué es tan importante usar HTTPS? En primer lugar, utilizar HTTPS es más seguro tanto para el usuario como para el servidor web, ya que el cifrado se realiza entre ambos, desde el servidor al usuario final y viceversa. De esta forma, ninguna de la información transmitida durante la conexión está en texto plano, evitando ataques como el tipo man-in-the-middle. En segundo lugar, un certificado SSL auténtica el sitio web, lo que significa que un tercero confiable verifica que el servidor web es quien dice ser, protegiendo al usuario contra diferentes amenazas como la suplantación de sitios web.

Hoy en día, utilizar HTTPS es imprescindible para ganarse la confianza de los clientes potenciales para tu sitio web, garantizando una seguridad básica a través de una conexión cifrada. Es importante mencionar que cualquier sitio web sin un certificado SSL válido se marca automáticamente como "no seguro".

5. Pruebas de penetración

Las aplicaciones web son sistemas críticos ya que están directamente expuestos al mundo exterior. Dada esta importancia, deberías preocuparte por la seguridad de tu red. La única manera de saberlo verdaderamente es poniéndolo a prueba.

La práctica de las pruebas de penetración demuestra ser un activo valioso para detectar vulnerabilidades antes de que puedan ser explotadas por actores maliciosos. Al evaluar minuciosamente las medidas de seguridad implementadas, se pueden identificar y abordar posibles debilidades, reduciendo el riesgo de un ciberataque exitoso. Este enfoque proactivo de la seguridad refuerza la importancia de mantener una estrategia de seguridad integral y sólida.

Durante una evaluación de vulnerabilidad, se prueban algunos tipos cruciales de ataques:

  • Ataques de inyección
  • Control de acceso erróneo
  • Manejo inadecuado de errores
  • Ataques XSS

A veces, las personas que creamos los desarrollos web podemos cometer errores. Para asegurarse de que tu trabajo y el de tu equipo esté libre de errores, puedes realizar una prueba de penetración. Esta prueba ayuda a identificar y corregir cualquier punto débil que los piratas informáticos puedan aprovechar. En aplicaciones que deben cumplir con las regulaciones PCI DSS, HIPAA o similares, las pruebas de penetración son obligatorias. Se considera una de las formas más efectivas de proteger la red contra intentos de piratería.

6. Gestión de las dependencias

Administrar dependencias de software puede ser una tarea desafiante, ya que implica tratar con bibliotecas externas que realizan funciones específicas y pueden variar en tamaño y complejidad. La gestión de dependencias es una técnica que se utiliza para manejar estas dependencias identificándolas, resolviéndolas y parcheándolas en el código base de la aplicación. Requiere mucha atención a los detalles y puede ser un proceso complejo.

¿Alguna vez te preguntaste por qué es importante vigilar tus dependencias? Bueno, el uso de dependencias obsoletas podría dañar potencialmente la seguridad de tu aplicación web, ya que ciertas bibliotecas pueden tener vulnerabilidades conocidas. Al no actualizar estas bibliotecas, pone en riesgo tu aplicación y posiblemente incluso pone en peligro a otras personas que la utilizan.

Al elegir dependencias para tu proyecto, prioriza aquellas que funcionen mejor y presenten el menor riesgo. A continuación se muestran algunas medidas preventivas que puedes tomar para monitorear posibles vulnerabilidades en sus dependencias de software:

1. Realiza un seguimiento de las dependencias que utilizas y las versiones de esas dependencias. Esto facilitará determinar cuándo está lista una actualización o si la versión que estás ejecutando tiene alguna vulnerabilidad conocida.

2. Revisa y actualiza las dependencias periódicamente. Verifica que esté utilizando las versiones más estables de las dependencias y piensa en emplear una herramienta para automatizar este proceso por usted. Herramientas como Snyk pueden ayudarte a identificar librerías desactualizadas o con posibles vulnerabilidades.

Proteger datos confidenciales

Proteger los datos es crucial para evitar que la información confidencial quede expuesta o sea violada. El mayor objetivo de los maliciosos es hacerse con los datos confidenciales. La filtración de la información puede tener consecuencias devastadoras. Estos incidentes provocan pérdidas financieras para los clientes de estos sitios web, así como daños a tu reputación. Además, las violaciones de datos pueden tener consecuencias legales. Las personas y las organizaciones pueden enfrentar sanciones legales según la jurisdicción y el tipo de datos filtrados. Al mismo tiempo, debemos sopesar los gastos de la ciberseguridad. Puede resultar costoso responder a una violación de datos. Para aliviar el daño y evitar futuros ataques, las organizaciones deben invertir en medidas de ciberseguridad.

Conclusión

En conclusión, las medidas de seguridad de front-end mencionadas anteriormente crean una defensa sólida que protege los datos confidenciales en las aplicaciones web. La validación y desinfección de entradas previenen el código malicioso; evitar scripts inline y usar CSP restringe la ejecución de código no autorizado como XSS. El cifrado HTTPS garantiza una transferencia de datos segura, lo que reduce los riesgos de intermediarios; Las pruebas de penetración encuentran y corrigen vulnerabilidades, agregando una capa adicional de seguridad; y la gestión eficiente de las dependencias mantiene las bibliotecas actualizadas, minimizando los riesgos de los datos.

Estas prácticas mejoran la seguridad del front-end, garantizando la protección de los datos y la confianza del usuario.

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