Seguro que ya has oído decir que la gente “juzga los libros por sus portadas”. Lo cierto es que las personas también juzgan a los sitios web por sus primeras páginas. Esta impresión inicial influye en las percepciones e interacciones posteriores, y se forma en gran medida en el punto de entrada de un sistema.

Un “punto de entrada” es “un punto de entrada físico en un diseño”, y los elementos clave de un buen diseño de punto de entrada son “barreras mínimas”, “puntos de perspectiva” y “señuelos progresivos”.

Barreras mínimas

Un punto de entrada no debe tener barreras que estorben. Cualquier cosa que impida que las personas lleguen al punto de entrada es una barrera. Por ejemplo, pantallas con muchos elementos innecesarios. Estas barreras pueden existir de forma estética o funcional.

Puntos de perspectiva

Un “buen punto de entrada” ayuda a las personas a orientarse y analizar claramente las opciones que tiene. Las páginas web que brindan buenas opciones de navegación tienen incluidos puntos de perspectiva. Por eso, deben proporcionar suficiente tiempo para que una persona revise esas opciones sin muchas distracciones o interrupciones.

Señuelos progresivos

Los señuelos sirven para atraer a las personas mediante el punto de entrada. Un señuelo progresivo puede ser un texto (copy) convincente en la primera página de tu sitio web, por ejemplo. La idea que las personas se acerquen, entren y se muevan progresivamente mediante el punto de entrada.

Conclusión

Para acabar, en tus diseños deberías maximizar la efectividad del punto de entrada reduciendo las barreras, estableciendo puntos de perspectiva claros y usando señuelos progresivos. Recuerda que tus usuarios deben tener el tiempo y espacio suficientes para revisar las oportunidades de interacción en el punto de entrada.

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